Por lo general las festividades navideñas están marcadas por una serie de platillos típicos de la época, pero no sucede lo mismo en el Año Nuevo, fiesta que permite explayar nuestra imaginación culinaria y servir cualquier tipo de comida año con año.
En mi casa optamos por un menú estilo country: trajimos un trozo de rib eye del cual fuimos haciendo cortes para obtener unas fajitas que pusimos al grill. Acompañamos este manjar con una ensalada, que cada comensal se preparaba a su gusto, eligiendo los ingredientes de la barra; además de la carne y la ensalada, había puré de papa, sobre el que se espolvoreaban trocitos de tocino de pavo frito y un gravy.
Otra variante para cenar en Año Nuevo podría ser una mariscada. Recientemente preparé un ceviche verde sobre rodajas de jícama que resultó muy bueno.
Unos bocados de coco pueden funcionar como postre en la cena, o formar parte de la variedad de opciones si se elige montar una barra de postres. Este 1 de enero nosotros comimos el típico pastel de zanahoria que a todos suele gustar.
Y para finalizar las fiestas de enero, cómo olvidar la rosca de reyes, que sola o con sus múltiples rellenos nunca falta en los hogares del mundo. Este año, la rosca que preparé tenía un relleno consistente en queso crema, nueces, dátiles y arándanos.
Sea por el motivo que sea, anímense a cocinar, con recetas o inventando, seguro se divertirán mucho y más importante aún: reunirán a su familia y amigos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario