"No puedo comerlo, tiene azúcar", "me hace daño porque es de trigo", "... mucha grasa", "... sal, picante"... ¿Alguna de estas frases te suena conocida?
Estos y otros tantos alimentos consituyen un desfile de prohibiciones para una gran cantidad de personas. Algunas de las enfermedades que pueden ocasionar una necesidad de cambio en nuestra alimentación son: la diabetes, la enfermedad celíaca, la gastritis, la hipercolesterolemia, la hipertensión arterial, la insuficiencia hepática o renal, entre otras.
La buena noticia es que hoy en día encontramos en el mercado una considerable variedad de productos alimenticios especiales que hacen más amigables las comidas de todos los días, sobre todo en estos casos.
Periódicamente, les voy a estar escribiendo acerca de algunos de estos padecimientos, qué alimentos pueden ingerirse y cuáles no, y les voy a pasar algunas recetas que los pueden sacar de apuros o darle variedad a su menú.